Al incio de la Temporada 07, Dick Bavetta desplazo a su compatriota Jake O'Donnell en cantidad de encuentros arbitrados en la liga numero 1 del mundo. Nada menos que 2135 juegos para el mas veterano de los arbitros.
¿Qué significa para ti tener el récord de partidos de temporada regular dirigidos en la historia de la liga? Significa que estoy viejo, y que he estado aquí muchos años (risas). Claro que cuando tuve la fortuna de llegar a la NBA en 1975, no estaba pensando en récords. Estaba tratando de llegar a mi próximo partido. Tengo básicamente la misma filosofía hoy - soy tan bueno como mi último partido. Me preparo de la misma manera para todos los partidos. Tengo el mismo nivel de responsabilidad. Ni siquiera estoy pensando en el récord. En el partido del miércoles, todo va a ser muy emocionante hasta que el primer silbato suene y la gente empiece a gritar que la falta fue injusta.
¿Hasta que punto ha sido tu estado físico una influencia en que nunca hayas faltado un día de trabajo en 31 años como árbitro?
Creo que muy importante. Sigo corriendo ocho millas diarias, tenga o no tenga partido. Mi padre siempre decía, "El hombre propone y Dios dispone". Para mí, el jefe allá arriba controla todo y me ha bendecido con buena salud.
¿Qué se necesita para mantener una carrera larga como árbitro de la NBA?
Siempre lo he considerado como un privilegio el ser árbitro de la NBA. Hay cierta responsabilidad que viene con esto. Hay veces que le he dicho a la gente que estoy muy orgulloso de ser un árbitro de la NBA y me han mirado y se han reído en mi cara. Es como tratar de convencer a alguien que estas felizmente casado...como, "qué!, ¿estas loco"?. Así que creo que parte de esto es tu estado mental. Sólo pensar en basketball todo el tiempo...los viajes, todo tiene su parte dificil. No hay tiempo para relajarse. Incluso, durante la pausa de la temporada, hay clínicas a las que debo asistir y ciertas responsabilidades de trabajo con los oficiales más novatos. Al menos que aceptes estas responsabilidades, habrá un problema. Nunca he tenido un problema.
Siempre has demostrado estar más animado dentro de la cancha, mucho más que otros árbitros. ¿Tratas de hacer un poco de "show" para los aficionados como parte de tu trabajo o es simplemente parte de tu personalidad?
Creo que es parte de mi personalidad. Empecé dirigiendo partidos en 1966 en el Eastern League, que fue la liga anterior a la CBA. En escuelas secundarias y universidades, había más estructura en la mecánica, pero nunca había esa estructura en el Eastern League, incluso en los primero años de la NBA. Si te veías un poco animado en ciertas ocasiones, nunca era un problema. Todavía entiendo completamente que tengo que mantenerme dentro de lo aceptado en mi trabajo como árbitro, pero al mismo tiempo, mi formación esta basada en que si a un tipo le pegan en la muñeca, tu también te pegas en la muñeca. Si a un tipo le pegan en la cabeza cuando esta penetrando hacia el aro, tú te tocas un lado de la cabeza. Imitas la falta que acaba de suceder. Nunca me han restringido de ninguna manera.
¿Cuál ha sido la actuación más impresionante que has visto en todos tus años como árbitro?
Fue en el partido de Nueva Orleans contra Nueva York. Creo que Pete Maravich tuvo 68 puntos. Esto fue en mi segundo o tercer año. Fue una actuación impresionante. Trabaje un partido con Michael Jordan donde anotó 63 puntos o algo así. Lo interesante es que como árbitro, no sabes que esta sucediendo cuando estas dentro de la cancha. Lees el periódico al siguiente día y piensas “¡No puede ser”! No sabes que es algo increíble cuando esta sucediendo. No creo que haya estado asombrado de ninguna jugada en particular en un partido sino hasta verlo en ESPN al día siguiente. Estoy un poco ciego a las jugadas individuales que suceden en mis partidos.
¿Hay algún partido que sobresalga como el partido más memorable que hayas dirigido?
Un partido que siempre recuerdo es uno de los 80, cuando Boston jugó contra Filadelfia. Fue mi primer partido transmitido nacionalmente. Estaba trabajando con Jack Madden, quien era uno de los grandes oficiales de su época. Cuando inició la segunda mitad del partido, Dennis Johnson se tropezó, se estrelló contra Jack y le ¡rompió la pierna! Yo estaba ahí solo. Envié a ambos equipos a sus bancas, fui a los vestidores y le pregunté al doctor cual era su diagnóstico. Me dijo que Jack no podría dirigir el resto del partido y que, incluso, estaría fuera de acción por mucho tiempo.
Sabía que tenía que volver a salir y dirigir la segunda mitad solo. Y para colmo, K.C. Jones estaba de técnico de Boston y Billy Cunningham de Filadelfia. Los lleve a todos a la mitad de la cancha y les informe que estaría trabajando la segunda mitad solo y que haría lo posible para remplazar a mi compañero. Necesito la cooperación de todos, etc. Estuvieron de acuerdo y 30 segundos más tarde tuve que darle una falta técnica a K.C. Jones. En el cuarto período, levanto la cabeza y veo a Larry Bird y Julius Erving ¡ahorcándose! Los terminé sacando a ambos del partido. Resulta que fue la única vez que Julius y Larry habían sido expulsados de un partido.
Los periódicos al siguiente día fueron muy amables en sus reportajes de cómo había manejado la situación, así que resultó ser un partido de exhibición para mi. La liga dijo que si yo podía manejar un partido transmitido nacionalmente, la segunda mitad solo, y eliminar a dos súper estrellas, daría a parecer que tal vez podría ser un árbitro.
¿Cual es el jugador más simpático que has dirigido?
Tengo que decir Sam Cassell. Es un gran jugador con una gran personalidad. Recuerdo cuando jugaba en Houston, Hakeem Olajuwon siembre gritaba 'Sammy' durante todo el partido. Desde entonces le digo Sammy y el a mi ‘Dickie’. Siempre parece estar pasándola bien, como es él. Siempre digo que siento como si estuviera celebrando mis 16 años. Creo que nunca crecí. Siempre estoy recordándome que nunca hay que tomarse muy en serio. ¿Cuánto tiempo más planeas dirigir?
Todo esto ha sido muy especial para mí. Nadie nunca ha hecho 31 años. En realidad no pienso en cuando voy a parar. La NBA monitorea todo lo que hacemos tan de cerca, que si ellos pensaran que estoy volviéndome ineficiente en lo que hago, lo sabría. Lo dirían. Pero por mi parte, mientras tenga buena salud, no tengo metas de que tanto tiempo más continuaré trabajando. Definitivamente me encantaría terminar mi temporada número 31, y luego al final de la próxima temporada, sentarme con la NBA y preguntarles si piensan que sigo lo suficientemente efectivo para continuar.
Cuando finalmente te retires, ¿qué aspecto de ser árbitro de la NBA vas a extrañar?
Hay una cierta camaradería que voy a extrañar, más con los oficiales jóvenes, que tienen menos experiencia. El rol que he tenido últimamente es el de tutor, que en realidad lo he disfrutado. Puedo compartir mis años de experiencia y las cosas que he aprendido a través de los años. Es como cualquier trabajo en que el veterano de la industria les da a los jóvenes estructura y les enseña como se hacen las cosas, eso no tiene precio. Ser tutor es realmente interesante para mí. Cuando empecé a trabajar como árbitro, cuando alguien me decía 'Blackberry' yo hubiera pensado que era una fruta en mi cereal. Ahora, me monitorean con esas cosas las 24 horas del día. Estoy aprendiendo a adaptarme a todas esas distintas formas de monitoreo y contabilidad trabajando con estos chicos. Es un gran intercambio, y muy gratificante. Más que nada, quiero que los chicos jóvenes entiendan la responsabilidad que viene con el trabajo, y el gran privilegio que es representar a la NBA. Es lo que más voy a extrañar.
